II
Una vida se resume en un instante,
una multitud en una persona
tan poco valor contiene lo restante
como lo material en lo ideal de una corona.
Escribo estos versos sin saber de poesía
escribo estos versos sin entender la ironía
del memorable paseo en las nubes del cielo;
doloroso el recuerdo cuando se torna en anhelo.
Una vez juramos por siempre estar juntos
hoy, a kilómetros de distancia me pregunto:
¿Están realmente lejos los corazones con cuerpos separados?
¿O se encuentran abrazados en lugares creados por nosotros?
¿O por mí?
Te escribo en mi papel porque solo aquí puedo ser
donde la mente me atormenta, mi pluma se alza como arma
ven de noche, abrázame, bésame, los sueños no pueden ofender
hazme el amor y vete de madrugada, que se asoma el alba.
Luego déjame y no vuelvas a buscarme
el humo y el alcohol me reconfortarán, intuyo,
y que me seduzca la soledad al besarme
sus labios duelen menos que el recuerdo de los tuyos.
Dile a tu memoria que se mude contigo
mete en una maleta lo que resta de tu presencia
en mi armario ya no caben más abrigos
que cubran el frío de la brisa de tu ausencia.
Esteban Cordero aka Corso
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